7 de marzo de 1978
Dr. Rafael Caldera.
Distinguido amigo y señor Presidente:
Había oído hablar mucho y muy bien de su discurso en la Asociación de Ejecutivos sobre los 20 años de 23 de enero de 1958, pero sólo ahora he podido leer el texto completo en la revista Resumen de 5/3/78.
Le felicito de corazón. Es una lección llena de pedagogía en el más alto sentido de la palabra y de fe en la democracia y en Venezuela que tanto deben a su brillante conducción política. Será o debe ser lectura obligada para toda nuestra juventud y desde luego para mis hijos.
En nombre de ellos ¡muchas gracias!
Reciba la expresión de afecto y respeto de su apreciado amigo,